Consejos para tu carpinteria de aluminio
A la hora de cambiar la carpintería de aluminio de la vivienda, siempre surgen las normales dudas de cara a la elección de los nuevos elementos y sus materiales. Decantarse por el aluminio resulta ser siempre una opción muy adecuada, debido a sus buenas cualidades. Los cerramientos de aluminio son especialmente aconsejados para las superficies acristaladas. Protegen la vivienda del exterior a la perfección, si se coloca también un buen marco de aluminio y un adecuado cristal. De este modo, se mantiene una buena temperatura en el interior de la casa, gracias a lo cual el ahorro de energía es considerable, dado que no se tendrán que utilizar otros elementos de climatización. Estos cerramientos también permiten la entrada de luz natural.
Si debe colocar una puerta en un espacio reducido, donde será muy difícil poder abrirla, se recomienda instalar una puerta de aluminio corredera, las cuales son muy herméticas hoy en día y cuentan con elementos que no dejan pasar el aire. Las puertas de aluminio plegables se recomiendan colocar en porches, invernaderos, o en lugares donde sea necesaria una gran apertura de la puerta.
Sin embargo, será de máxima importancia realizar un mantenimiento mínimo correspondiente en estos cerramientos de aluminio, de cara a que con el paso del tiempo este material no pierda ni su funcionalidad, ni su bonita estética.
Siguiendo una serie de importantes consejos logrará que sus ventanas de aluminio tengan siempre la misma apariencia que el primer día.
Limpieza periódica
Las ventanas realizadas de este tipo de material deben limpiarse cada 4 o 6 meses, es decir, dos o tres veces al año. Para ello se recomienda utilizar una esponja con un producto de limpieza, o agua tibia con un poco de jabón neutro en estado líquido. Una vez haya frotado los perfiles de aluminio debe aclarar la superficie tratada con agua limpia y secarla adecuadamente con un paño absorbente.
Resulta contraproducente realizar la limpieza con cualquier otro producto que tenga en casa, ya que los abrasivos, por ejemplo, suelen eliminar la capa de protección de la ventana de aluminio. Hay que tener cuidado y no utilizar tampoco los productos con los que se limpia el aluminio en bruto ni los químicos inadecuados.
Resulta importante controlar que no se almacene ni suciedad ni cualquier tipo de residuo en los raíles de las ventanas, lo que podría llevarlas a perder calidad y no cerrar como deben. Para eliminar esa suciedad que en ocasiones se acumula, utilice la boquilla del aspirador y evitará que sus ventanas pierdan calidad al cerrarse.
Las ventanas de las viviendas de ciudades tienden a tener concentrada mucha más suciedad generada por los gases y el agua de lluvia. También se encuentran en situación especial las de hogares ubicados cerca de la costa, las cuales reciben el salitre del mar. Por ello, tanto las ventanas ubicadas en medios urbanos, como las que se encuentren al lado del mar deberán ser mantenidas con una mayor periodicidad.
Buen uso de la carpintería de aluminio
Trate de no dar fuertes golpes a la hora de cerrar las puertas o las ventanas de aluminio de su hogar, ya que esto podría dañaras. Las persianas también se deben subir y bajar con suavidad para evitar futuros problemas. Sobre todo en invierno, con la finalidad de evitar las condensaciones, resulta imprescindible ventilar adecuadamente toda la casa.
